Nos parece casi mentira, pero hoy nuestro compañero, nuestro mejor compañero, cumple un año.
Aquel curioso cachorro, de apenas 20 dias, que salio de entre las patas de su madre y de la compañía de sus siete hermanos para venir a oler nuestros zapatos y levantar su cara hacia nosotros, nos cautivó desde el primer momento y se nos metió en el corazón. De ser alguno tendría que ser ese.
Eramos conscientes de que nos cambiaría la vida. Que la libertad de la que disfrutábamos hasta ese momento, sería disminuida por la necesidad de educar y cuidar a lo que en principio no era mas que una mascota.
A lo largo de las entradas a este blog de este año habéis ido teniendo noticias de él y de como se ha transformado en un personaje que tenemos muy en cuenta a la hora de tomar decisiones que afectan a toda la familia. y digo familia consciente de que DraKo es solo un animal, que piensa como un perro y se comporta como un perro. Pero creemos que es feliz con nosotros como nosotros lo somos con él.
El caso es que nuestra vida, llena de anécdotas, ahora se incrementa con las que nos hace vivir nuestra mascota. Y el día de su cumpleaños nos hizo vivir una de ellas de una forma muy preocupante.
Drako es un PDAE ( Pero de Agua Español) y pertenece a una raza muy activa y dedicada entre sus muchas habilidades a la detección de substancias, búsqueda de personas en siniestros, pastoreo de rebaños, recuperación de peces por los pescadores, y un largo ETC de este tipo de perros.
Una de las actividades mas sobresalientes es su uso para recuperar piezas de caza en los humedales, dada su gran capacidad de natación ( tiene membranas entre los dedos de las patas) y su capacidad de bucear incluso hasta seis metros de profundidad, lo que les transforme en ideales para recoger piezas de los cazadores.
Así que su gran diversión es correr y correr detrás de una pelota para traerla a tus pies hasta caer agotado, cosa que sucede mucho después de que tu lo estés de tirársela.
Drako ha encontrado una diversión. Cuando ve una lata de cerveza, la empuja con el morro la hace rodar y luego la persigue, la acosa y la captura. Y vuelta a empezar.
El día de su cumpleaños, le dejamos, contra lo habitual que jugara con una de ellas dentro del barco, sin percatarnos de que aún había restos de Mythos en su interior y que DraKo rodaba y lamia y lamia como si de un juguete interactivo se tratara.
Ya cansado se tumbó en su rincón favorito y empezamos a oír unos sonidos poco habituales.
Tumbado boca arriba roncaba como un demonio con la consiguiente preocupación por nuestra parte, ya que no teníamos ninguna información sobre como tratar el "Delirium Tremens" de un perro.
Afortunadamente todo quedó ahí, y como secuela que cada vez que abro una cerveza viene a ver si puede meter el hocico.
Le hemos hecho un regalo a DraKo.
Le hemos preparado una rampa para que en caso de saltar al agua pueda volver a subir al barco, utilizando la escala del barco, a la que hemos sustituido las gomas por unas que pueda vencer con su peso. El invento funciona aunque no es el uso que le ha encontrado
Para DraKo la auxiliar es sinónimo de ir a la plata , a correr ( ahora creo que también a buscar latas de cerveza), así que la plataforma le sirve para saltar a la auxiliar.
Desde allí espera a que lo llevemos a sus paseos diario, cosa que nosotros cumplimos a rajatabla y el nos responde respetando todo el barco.
Gracias Drako por haber entrado en nuestras vidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nos interesan mucho tus comentarios.
Puedes ponerlos aquí