Salimos de
Cartagena de madrugada,
después de haber pasado un rato comentando con otros barcos del Foro de la taberna del puerto que venían de
Almería su travesía por aguas de Marruecos (que a nosotros nos falta en gran medida)
De nuevo los pesqueros, que consideran que navegar hacia sus sitios de trabajo es también trabajo y los hace inviolables, cuando solo lo son en el caso de estar restringidos en sus maniobras por estar con los aparejos colgando.
Y por delante otro día de aburrida navegación a motor. Hacemos rumbo directo a Gata y un último intento de pesca, que resulta infructuoso.
Vamos ya recogiendo cosas y
Lola a preparado una colada que pone a secar en un andarivel cogido a la jarcia.
De repente recibo una llamada por
DSC en el canal 69
.-Eco Alfa 7075, Eco Alfa 7075, ¿Roger?
.-Roger. Aquí la embarcación Capitán Teach, Eco Alfa 7075Contesto y compruebo por el indicativo que es un pequeño carguero al que
iba controlando por que está pasando a pocos metros de nosotros.
A partir de ahí todo
fue como estar conectado a un teléfono
erótico.- ohhhh, que cuulito tan boniiiito
.- ohhh, que culito ohhh
.- ahhh mi culitoUna mirada por el exterior de nuestro barco me muestra a una atareada L
ola que con bañador, una camisola y atada con el arnés que sale del chaleco
inflable, presenta una imagen, que aunque para mi es enormemente atractiva, es cualquier cosa menos "normalmente" erótica.
Salvo que por la distancia el "mirón" haya confundido los flotadores del chaleco con dos enormes pechos azules.
La emisora sigue emitiendo
.- ohhhh, que cuulito tan boniiiito
.- ohhh, que culito ohhh
.- ahhh mi culitoLos jadeos
continúan un buen rato
Creo que debe ser la primera noticia de que
AIS y
DSC se utilicen para estos menesteres
Al pasar Cabo de Gata establecemos contacto con nuestro amigo
Carmelo del "Olaje" que se dirige también a Roquetas desde el lado contrario.
Llegamos casi al mismo tiempo. A mi me dejan amarrado al muelle de espera, cosa que no me gusta, pues está lleno de cagadas de gaviotas,
huele mal y al subir y bajar del barco lo ensucias todo.
En el puerto
están también algunos amigos, pero la mayoría están de viaje.
Carmelo nos lleva a Cenar en plan tapas a un bar donde nos sientan en una mesa en la acera.
Con los chips aún sin cambiar, paso un mal rato por el ruido, los gritos, el olor a aceite de
freír y el suelo que no se mueve. Lo compenso por la
compañía y por poder comer por
fin unas sardinas a la plancha poco hechas ( con los dedos y encima un pedazo de pan)
De vez en cuando me acerco a
Lola y le digo por lo bajo
.- ohhhh, que cuulito tan boniiiitoDeben de pensar que la sal nos ha
vuelto locos al vernos
reír de esa manera