Hemos pasado varios días amarrados en este puerto y hemos alquilado un coche con el que hemos ido investigando la isla, que no ha defraudado los comentarios magníficos que sobre ella nos habían dado.
En términos generales no hay nada " supercalifragilisticoespialidoso", pero el conjunto es sorprendentemente de lo que mas nos ha gustado de Grecia.
El primer dia nos dedicamos a las playas del sur.oeste, digamos las mas glamurosas de la isla y donde se concentra el no excesivo público, que aunque numeroso, no llena las playas ni dá sensación de agobio.
En la isla solo hay una carretera principal que une Myrina con el aeropuerto y un poco mas allá hasta Kallopi. En cuanto quieres salirte de esta ruta tienes que empezar a circular por carreteras de Tierra, por lo que los promedios son muy bajos.
Loutra, Ropalo, Stivi, Panteli, son los nombres de algunas de las playas que fuimos visitando en esta zona, playas de arena fina, limpias y con esas aguas turquesas que denotan la visibilidad de sus aguas, todas ellas en ensenadas muy profundas y protegidas de viento y oleaje.
Por la tarde nos dedicamos a buscar uno de los iconos de esta isla. La capilla de Kakaviotissa, al parecer la única capilla sin techo de toda Grecia, ya que está construida en una oquedad en la montaña.
Para llegar hasta ella hay que adentrarse en un laberinto de caminos e indicaciones caidas y donde las equivocaciones suelen llevarte a carriles en fondo de saco y conde hay que hacer la vuelta marcha atrás, pues el ancho no dá para hacer la maniobra.
Después de casi dos horas de búsqueda llegamos a un portón cerrado y allí dejamos el coche, para hacer el resto del camino, unos 500 metros cuesta arriba andando , hasta llegar por una escalera a este curioso rincón
No deja de ser un sitio curioso. y sorprendentemente sin ninguna protección especial para los iconos y exvotos que cuelgan de las paredes, fiados solo a la buena voluntad de los humanos visitantes
La mitología de la isla es un tanto curiosa y digna de ser contada. La isla entra en la leyenda mitológica a raíz de que la diosa Hera, al dar a luz a Héfesto (Vulcano) lo arroja fuera del Olimpo al ver lo feo y deforme que era. Pero antes de que choque contra el suelo, los isleños lo cojen y lo acogen entre ellos, por lo que Héfesto pasa a ser el dios tutelar de la isla, mientras se dedica a fabricar rayos y centellas para Zeus.
Pero lo que realmente hace famosa en la antigüedad a la isla son sus mujeres, las Lemnias, famosas por el mal olor de sus cuerpos, según unos por falta de higiene y según otros como consecuencia de un castigo de Afrodita.
El caso es que sus hombres las repudiaban y se marchaban a otras islas cercanas a buscar mujeres , a las que secuestraban y hacían sus concubinas.
A las Lemnias se les inflaron las narices y de una sentada se cargaron a todos los hombres, viviendo solas y tranquilas, satisfaciendo entre ellas sus necesidades sexuales. (curiosamente eso las hace lesbianas, pero Lesbos, de donde se toma el nombre es una isla cercana que hasta donde yo sé, se dedican tranquilamente a fabricar "ouzo". Y en esas estamos hasta que un buen día aparece un barco, nada menos que el Argo cuya réplica hemos visto en Volos. cargadita de fornidos y heroicos navegantes, capitaneados por Jasón y conocidos como los argonautas.
Las Lemnias corrieron a ponerse las armaduras de sus hambres muertos y plantaron cara a la tripulación de Jasón, que mas interesada en hacer acopio de agua y provisiones que en ningún otro menester negocian un intercambio de favores. Así que después de pensárselo bien, y supongo que tras de darse un buen baño, sedujeron a los tripulantes del Argos, que yacieron con ellas hasta que todas quedaron embarazadas, lo que suponía la continuidad de su aventura feminista obviando la natural falta de disposición a la descendencia de su forma de vida.
Unas cuantas de entre ellas se fugaron con los marineros de Jasón, entre ellas su reina, Hipsípila que le dió a jasón dos mellizos y unos cuernos vikingos.
La revuelta de estas antecesoras de las nuevas feministas beligerantes tan de moda estos días fueron " puestas al orden" por Euneo, uno de los dos regalos que Hipsipila le dejó a Jasón ( me refiero a uno de los mellizos) para lo que durante nueve días apagó todos los fogones ( antecedente de las Novenas), que fueron nuevamente encendidos con una llama procedente del Templo de Apolo.
Por cierto que aparte de curarles la misandria, también debió influir en la higiene femenina, ya que en la actualidad las mujeres de Limnos no huelen de forma diferente al resto de las mujeres de nuestro mundo y cultura.
Terminamos el día en una playa al norte de Myrina donde por primera vez nado en compañía de Draco, que está disfrutando de Limnos tanto o mas que nosotros.