LAS PAGINAS DE MI BLOG

viernes

LA VUELTA A CASA DEL 2011.-7º


Ver La vuelta del 2011 Etapa V en un mapa más grande

"Tripu Z" es que quiere saber de todo, opinar de todo llevar la razón en todo y eso es algo imposible incluso para algunos dioses mitológicos y si ellos meten la pata, mas lo hace un pobre ser humano.

En los foros náuticos, donde "Tripu Z" adquiere y transmite conocimiento se ha comentado de forma interesada por agentes comerciales de la competencia un incidente de pérdida de un timón en un barco de la marca Bavaria, como si eso fuera algo crónico de todas las unidades ( varias decenas de millar) que navegan por el mundo.

Lo que "Tripu Z" ha "detectado" es una pieza que lleva el eje del timón, que lleva tres taladros y en uno de ellos un tornillo. Los otros dos son para, utilizando una herramienta especial, ir apretando el cojinete a medida que este adquiere holgura. Una vez apretado se bloquea con el tornillo. A simple vista quedan unos huecos que pudieran parecer alojamientos de tornillos.

Mi primera intención es decir a "Tripu Z",algo como "vete a tomar por el culo" pero aún me quedan algunos controles para vencer el cansancio acumulado y le digo algo así como " Tripu Z, es una lástima que después de la magnífica función que has hecho con el sangrado del motor, la cagues con meteduras de pata tan tontas como esta, anda vamos a dormir que todos estamos muy cansados y son las cuatro de la mañana."

Así que nos vamos a dormir y por casualidad veo que sus destartalados camarotes están como que muy recogidos y todo muy metido en sus maletas.

Supongo que han planeado ( y digo planeado de forma conjunta "Tripu A-Tripu Z", pues "Tripu Z" no se atrevería nunca solo) desembarcarse en Palermo, desde donde hay comunicación via avión con la peninsula y que esa era el motivo de las idas y venidas al Cibercafé de Crotone.

No hubiera pasado nada si me lo dicen. Yo hubiera preparado planes para dejarlos en Palermo, descansar un par de dias y luego hacer yo solo el siguiente salto. Pero me siento traicionado y mi ser pide venganza.

Así que por la mañana muy temprano, sobre las siete en que aparece el gasolinero, lleno los depósitos de gasóleo, pago y suelto amarras. Como había supuesto en cuanto "Tripu A" escucha el motor sale a ver que pasa y le digo que hay un parte muy favorable y que vamos a cruzar a Cerdeña, que no se preocupe y siga durmiendo que no hay nada que hacer por ahora. Y sin esperar contestación me voy a la proa a quitar las defensas y recoger los cabos. Maniobra que me dura hasta que estamos ya fuera del puerto de Palermo.

Ambos están muy sorprendidos pero no dicen nada. Tan solo después de tener entre ellos un concienciabulo, mientras yo me retiro después de desayunar a darme una ducha y asearme un poco. "Tripu A" me pide permiso para utilizar mi ordenador y conectarse a Internet. Supongo que para anular reservas de avión o algo por el estilo. No hay inconveniente.

El día se presenta muy favorable y un viento por la aleta nos hace caminar muy rápido, aunque hay un poco de oleaje que mece el barco y les obligo a ponerse chalecos y arneses para andar por el barco.

Me preguntan que donde vamos y les contesto que en dirección a Cagliari. y que llegaremos al día siguiente como a medio día. Nueva conexión de ordenador y mas charletas entre ellos. Yo me paso casi todo el día dormitando en el camarote, pues preveo una noche muy larga.

"Tripu Z" lo está pasando muy mal. Supongo que su problema de sordera le debe afectar al equilibrio y está mareado y desorientado. Una de las veces en que baja al interior, pierde el equilibrio en un bamboleo del barco y se cae llegando desde la cocina en la banda de babor a la "dinet" en la banda de estribor pasando por encima del sillón central y la mesa. Un señor golpe que afortunadamente no le deja mas que algún cardenal.

Pero ya  de noche lo veo salir del camarote sin el chaleco y sin el arnés. Pienso que está mareado y quiere vomitar y salgo afortunadamente detrás de él para ayudarle Pero el muy estúpido se sube a la borda y se pone a orinar cogido al toldo. Naturalmente al primer bamboleo pierde el equilibrio y solo la fortuna y el fuerte tirón que yo le pego del cinturón lo hace caer dentro del barco.

Se me han puesto todos los pelos de punta la adrenalina me sale por la orejas y le ordeno y le amenazo para que no salga en toda la noche de su camarote. Que si su hombría se siente dañada por tener que sentarse  en el WC si tiene que mear que se lo haga encima. Estoy bastante alterado.

"Tripu Z" se va al interior, coge una botella y la llena de agua y se dirige al camarote. Un nuevo golpe de mar lo vuelve a hacer perder el equilibrio y veo con espanto como la botella de agua sale despedida y aterriza encima de mi ordenador Un portátil HP de 17 pulgadas y muchas prestaciones con el que yo hago mis trabajos profesionales. Veo con espanto saltar chispas del ordenador y apagarse. Lo ha llenado de agua.

En ese momento pierdo los papeles y por mi boca debieron salir todo tipo de insultos gritos y bejaciones hasta que le dejé encerrado en el camarote y diciendole que se desembarcará en el primer puerto que toquemos. Tantos gritos que me dañé las cuerdas bucales y luego casi no podia hablar.

Desmonté como pude el ordenador y sobre todo le saqué el disco duro de estado sólido donde debería estar todo el trabajo de tres meses de un proyecto que tengo encargado. Intento secar los componentes con un secador de pelo, pero no consigo nada. Está muerto. Y no son los tres mil euros del valor del ordenador, sino toda la información hasta la anterior copia de seguridad en el servidor y que es casi el proyecto completo con muchos cientos de horas de trabajo dentro. También me ha inundado un disco externo donde llevo grabados todos mis cd de música, casi medio terabyte y toda la documentación del barco y las cartas de navegación que llevo impresas en papel.

Lloro de rabia y frustración. Hoy pasado el tiempo, pienso que el único responsable de esta situación he sido yo mismo, al aceptar que este nefasto  personaje se subiera en mi barco en Atenas, al dejarme convencer de su falsa pobreza en Corfú y sobre todo de no haber dejado escapar a las ratas de Palermo.

Paso toda la noche a la rueda y a la vista de la Isla de Cavoli, en la demora de Cagliari, casi al amanecer pues hemos ido muy rápido, hago un cambio de rumbo. Se lo puedo poner mas fácil y desembarcarlo a unos metros del aeropuerto. Pero van a seguir chupando olas unas cuantas horas mas. La previsión para el día de hoy sigue siendo de vientos portantes pero cambiarán a Oeste muy fuerte y se hace previsible que pasaré varios dias en puerto. Y me dirijo hacia Carloforte al otro extremo de la isla.

Pero cansado, muy cansado me dirijo a Teulada, una marina en la que nunca he entrado y que está en... la mitad de ningún sitio. Además es barata, tranquila y una vez al día pasa un autobús que te lleva al pueblo donde puedes coger un taxi que te lleva a Cagliari a sesenta kilómetros por carretera.

Dicho y hecho. Llegamos a las seis de la tarde y "Tripu A" me dice que también se desembarca. Que el viaje no ha resultado nada parecido a lo que esperaba que se encuentra sucio, cansado, y con ganas de volver a tierra. Lo entiendo y me gustaría hacer algo para compensarlo por haberle hecho pasar por una situación tan tensa.

La única conversación con "Tripu Z" es que me debe un ordenador como el que me ha destruido y que se lo pienso cobrar o al menos hacérselo pagar por algún procedimiento. Y es que aunque fue un error mío admitirlo a bordo ha sido él el que me ha engañado en cuanto a sus conocimientos y aptitudes para navegar, que nos han expuesto a tener varios incidentes como embarrancar en la isla inexistente o caerse al agua.

Así todo les ofrezco que pasen la noche en el barco, pero supongo que ya no se fían de que no suelte amarras y los lleve hasta Menorca y se desembarcan.

Me ducho, voy a cenar andando dos kilómetros hasta la pizzería del Camping y veo una película en la TV hasta que consigo dormirme.

A la mañana siguiente me entero a través de los marineros de que no han podido ir al pueblo y que han pasado la noche en una auto-caravana en el camping.

jueves

LA VUELTA A CASA DEL 2011.-6º


Ver La vuelta del 2011 Etapa IV en un mapa más grande

En el último momento decido que no merece la pena lo dejo pasar. Y termino tomando café con ellos que al parecer han estado en el Ciber Café, donde la conexión no era muy rápida, hablando con su casa. Tomo nota de que no quieren seguir usando el ordenador del barco para sus mensajes

 Con la pérdida de tiempo hemos perdido la posibilidad de pasar el Cabo di Capo sin viento y nos espera una larga ceñida  con mas de 20 nudos y una ola muy incómoda, pero a medida que cae la noche el viento se calma y continuamos a motor.

Al llegar frente a Rochela Ionica la noche se presenta limpia y sumado a que ahora hay que pagar por estar en un puerto en que no hay ni agua ni electricidad y con una bocana demasiado complicada para entrar de noche, decido seguir caminando y así ganar unas horas. El mes de septiembre es muy cambiante en climatología y ahora hay que hacer un recorrido muy largo sin sitios para resguardarse y con unos puertos extremadamente caros. Por encima de los 100 € por noche.

Hay otro factos a tener en cuenta. Tal como vamos llegaremos al estrecho de Mesina con la corriente a favor, mientras que si paramos seis o siete horas a dormir en puerto nos vamos a encontrar el estrecho con la corriente en contra. Si pasamos de madrugada el viento estará en calma. Y si lo hacemos a medio día la previsión es de norte de 15 nudos, que mi experiencia es que sube hasta los 25 con facilidad.

Preparo las guardias para que me toque doblar el cabo de Spartivento, -donde hay una zona de prohibición de navegación y que dudo sepan gobernar mis acompañantes- y para que me toque el paso de Mesina que tiene un tráfico muy complejo.

A pesar de que en la zona no hay  "islas fantasmas" ni creo que seamos invadidos por "muchachos" de la Mafia Siciliana, descanso mal, pues no tengo controlados ni al Kraquen  ni a los lestrigones, cíclopes e irascible Poseidón a los que hace mención Kavafis.

El paso de Mesina es a motor y a una velocidad que llega a los ¡¡12 nudos !! cuando la velocidad de crucero que llevamos es de siete nudos.

"Tripu A" duerme y "Tripu B" no se da ni cuenta de lo que pasa. Supongo que a estas alturas ver a los ferrys caminando de costado por la corriente, en sus calculadísimas trayectorias parabólicas para cruzar el estrecho, no es algo de su interés. A mi me sigue pareciendo mágico. Los pescadores manteniendo los pequeños barcos en la corriente, los atuneros con sus insólitos barcos disfrazados de estructuras de Eifel, veleros parados en dirección contraria a la nuestra, los remolinos que se forman en la embocadura norte y el tráfico intenso de barcos de todo tipo, suponen un "chute" de adrenalina al que nunca me acostumbraré por muchas veces que lo pase.

Luego vienen muchas horas de motor en dirección a Cefalú donde tengo planeado hacer una parada y bajar a cenar a la calle. Un lugar encantador y una gasolinera que nos hace falta después de tantas horas de viaje.

Está cayendo la tarde cuando entramos por la bocana del puerto y al disminuir las revoluciones del motor, se para y no quiere volver a arrancar. Todo el génova fuera y también la mayor para salir a vela de la encerrona del puerto sin motor y volver a aguas profundas donde mirar que es lo que pasa. De nuevo tengo un problema de motor en el mismo sitio que el año pasado .

Según me ha explicado un mecánico, es posible que una burbuja de aire se quede estancada en la entrada de la bomba de inyectores y solo entre al circuito al cambiar el régimen de vueltas. Es posible que al cambiar los filtros no se hicieran las cosas bien y quedara aire en el circuito. El caso es que después de casi una hora de intentarlo y de un buen trago de gasoil "Tripu Z" consigue poner el motor en marcha, que renquea pero que poco a poco se autopurga y nos lleva hasta Palermo. No se si fué despiste suyo en Crotone o no. El caso es que ha sabido solucionarlo y tengo que alegrarme de que estubiera a bordo del barco

Ahí hay muchos planes según en que cabeza, pero un "Tripu Z" eufórico de haber adquirido justo protagonismo la vuelve a cagar cuando me suelta.

"Tengo que darte una mala noticia. No puedes seguir el viaje así porque tienes sujeto el timón por un solo tornillo"


CONTINUARÁ.........

miércoles

LA VUELTA A CASA DEL 2011.-5º

Ver La vuelta del 2011 Etápa III en un mapa más grande

El relato de "Tripu Z" me resulta de lo mas inverosímil por muchas razones.

Para empezar yo duermo como los niños , pero con un ojo abierto y me despierto a cualquier sonido extraño. Escucho a mis tripulantes levantarse a tomar agua o usar el W.C., escotas que se mueven por el viento... Y desde luego sacar el bichero de su alojamiento, debajo de las placas solares hace ruido justo encima de mi cabeza. Y lo que si tengo claro es que oigo mejor que "Tripu Z" y escuché un barco pesquero que salía a faenar y sentí el balanceo de algún mercante al pasar cerca de la costa. Pero no otros ruidos.

Además está el hecho de que llevo durmiendo con las puertas abiertas en los puertos de Grecia varios años y jamás he tenido ningún problema y ni tan siquiera he oído a nadie, en este mundo de cotillas náuticos, que somos los que por estas aguas navegamos, comentar nadie que haya tenido casos no ya de asaltos, sino de robos en los barcos. Me da bastante mas seguridad dejar el barco en puertos griegos que en mi propio puerto, donde son constantes las denuncias de robos y los altercados con los muchachotes del botellón que han encontrado un discreto lugar para sus escarceos amorosos bajo los toldos de los barcos.

Aceptemos que un grupo de borrachuelos jugó con la escala, pero de ahí a defensa heroica del alcázar... Pero corramos un tupido velo y guardemos la historieta para ser añadida a la novela del Quijote Náutico luchando contra gigantes en la ínsula de nunca jamás existió.

El Siguiente tramo nos deba de llevar hasta Santa María de Leuca, en la punta del tacón de la Bota italiana, pero un viento fresquito por el través y una mar en calma nos hacen caminar a una media muy elevada, hasta el punto de que a la hora que vemos la costa es demasiado pronto para detenernos y decidimos continuar hasta Crotone y el día ganado pasarlo allí descansando, hacer gasóleo y comprar alimentos frescos en el mercado. De paso me permitirá comprar una SIM para el módem del ordenador y tener acceso en las costas Italianas.

Propongo colocar las cañas de pescar y me encuentro con una férrea oposición de "Tripu A" que bajo ningún concepto quiere ver sufrir a un pobre pececito. Se suspenden ideas de pesca y eso que estamos en la zona donde habitualmente Lola y yo llenamos nuestro congelador para todo el invierno. Pero no quiero ni pensar en como reaccionaría "Tripu A" si por casualidad picara un túnido de 25/30 kilos, sus espasmos hasta su muerte y su necesario despiece para ser metido al congelador. Así que aburrido, sin una sola maniobra que hacer me dedico a dormitar y trabajar en el ordenador que llevo en el barco en un proyecto de Modificación de Elementos del Plan General, osease, algo muy técnico y lejano del mundo que físicamente me rodea.

Durante el recorrido, "Tripu Z", mas animado desde la cena de ayer,  me pide permiso para intentar solucionar algunos pequeños problemas de bricolaje que están pendientes y consigue solucionar un alineamiento de piezas del toldo a base de paciencia y maña. Le observo trabajar preocupado con el resultado y lo soluciona de una forma un tanto ingeniosa.


Llegamos a Crotone sobre las tres de la mañana y como la noche está en calma total, nos fondeamos en la bocana del puerto deportivo a la espera de que abran la estación de servicio, que , cosa rara en Italia, está en el muelle. Lo hago así porque en otras ocasiones en que he llegado con una o dos oras de antelación a la apertura de la gasolinera y me he amarrado al muelle, han pretendido cobrarme un día entero de amarre. Esta practica se está extendiendo desafortunadamente en muchos puertos, como sistema de combatir el que hay barcos que esperan a llegar a puerto a que se cierre la gasolinera para marcharse antes de que abran por la mañana y así hacer un pequeño (y no tan pequeño) ahorro.

Con el paso del tiempo, el afán de expolio que rodea a todo lo que huela a barco, ha pasado de que había unos atraque de cortesía de uno o dos días para los barcos que estaban en travesía, a dejar ocupar los muelles de espera, luego a cobrar incluso el muelle de espera e incluso el pernoctar en la gasolinera y en algunos puertos hasta se prohibe fondear en sus inmediaciones y menos aún dentro dela dársena, incluso estando marcadas en las cartas como fondeos.

El "Que te puedo dar" que hizo mítica la hospitalidad de algunos lugares se va inexorablemente cambiando al "Que te puedo sacar" que no me cabe duda que está muy en el fondo de toda la situación socio económica actual actual.

Hacemos gasóleo y nos amarramos en las instalaciones de la Liga Naval. "Tripu A" se queja de todo, calor, humedad, viento, sol, sudor, suciedad...Les aconsejo una larga ducha en las instalaciones del club, mucho jabón, y luego ropa limpia y seca, un desayuno servido en el bar y...  Mano de santo "Tripu A" confiesa que antes de la ducha tenía preparado el equipaje para marcharse del barco, que le estaba resultando demasiado tedioso y desagradable el estar todo el día con ropa sucia y sin lavarse (¿¿¿) No deja de sorprenderme, pues nadie le impide cambiarse de ropa y en el barco hay no menos de 600 litros de agua incluso caliente y estamos en zona sin restricciones, pues hay agua en cada puerto.

También pesan los días juntos y hace falta un poco de intimidad. Les propongo una vuelta por el mercado y la ciudad vieja de Crotone y que cada uno lo haga a su aire.

Entro en contacto con el varadero de Crotone para que me hagan el cambio de filtros y aceite, cosa que se me da francamente mal. "Tripu Z" me dice que es algo que siempre hace el personalmente a sus barcos y que me ahorre el dinero, pero prefiero que lo haga un mecánico, aunque eso si, nombro a "Tripu Z" jefe de máquinas y que sea él el que se entienda con el mecánico. Y así lo hace y se cambian filtros, pre-filtros tanto de gasóleo como de aceite. Y el barco queda listo para seguir su derrota.

A la vista del buen resultado de la cena anterior les invito a una pizzería que hay montada en un chiringuito en la playa y volvemos a tener una velada agradable y tras de unos "Uxos" en el barco cada mochuelo a su olivo.

Por la mañana, cuando llega el momento de marcharnos "Tripu Z" no aparece, pues se ha ido a buscar un Ciber Café, "Tripu A" sale en su busca y también tarda en venir. Al rato salgo yo y me los encuentro tranquilamente tomando un café. Siento unas ganas enormes de mandarlos a la mierda, arrancar el barco y dejarles el equipaje en el pantalán. Empiezo a romperme por dentro y me voy hacia ellos...

CONTINUARÁ...



martes

LA VUELTA A CASA DEL 2011.-4º


Ver La vuelta del 2011 Etapa II en un mapa más grande

Amanece un nuevo día y con él fin de la oscuridad desaparecen muchas de las sombras que la caída de la noche trae consigo. Iniciamos nuestra andadura hacia el norte de Corfú. Navegación a motor y poco que hacer son el mejor momento para hacer un poco de auto crítica y tratar de enderezar la situación, que puede volverse muy incómoda y que hay que cortar de raíz.

Se plantea la situación y es "Tripu A" quien arranca haciendo un llamamiento a dar una solución de lo que para él es una situación muy conflictiva, ya que no se están dando las condiciones de lo que el pensaba que era un viaje de placer.

Tengo que aclarar que no se ha planteado nunca como unas vacaciones, sino como un trabajo que hay que hacer y es devolver al barco hasta su puerto en Málaga.

Que sea un viaje placentero o no dependerá de nuestra predisposición para ello. Vuelvo a insistir en la necesidad de entender que para conseguir el respeto necesario a ser un "perro verde" comienza por aceptar que los demás puedan ser "cocodrilos colorados". Pero llevamos solo tres días y quedan demasiados por la proa y exijo un compromiso, en el que me incluyo,  de hacer lo posible por evitar situaciones de discusión y roce, aceptando la jerarquía de que soy yo el único que manda y que todas las decisiones están en mi mano.

Añado que este es un buen sitio para que el que no quiera seguir se vuelva a casa en un avión. Que no tengo inconveniente en dejar a quien no quiera seguir en Corfú, donde hay un aeropuerto.

"Tripu A" se hunde y confiesa que con su problema físico de sordera no podría desenvolverse. Pero es que además no tiene dinero para pagarse el viaje. Pero que a partir de ese momento promete no volver a decir nada salvo que se le pregunte y acatar todas las órdenes que se le den, limitándose el resto del tiempo a permanecer en su camarote. Yo le digo que para eso es mejor que se quede en Corfú, que no puede ir como un condenado a galeras ni es esa nuestra intención.

El caso es que después de casi dos horas de charla todo parece mas claro a todos y la decisión es unánime de saltarnos Corfú ciudad.

Sé que como capitán de un barco no estoy haciendo lo correcto, que debía haber puesto fin aquí y ahora al viaje de "Tripu Z", pero como ser humano no he podido hacerlo. Me he visto en él a mi mismo cuando pasen algunos años. Incapacitado físicamente y rompiéndose en mil pedazos el último de mis sueños, lejos de todo lo que me da seguridad y abandonado en un sitio donde desconozco el idioma, los lugares y la forma de volver a mi cubículo. He sentido una enorme tristeza al ver el fin de una etapa de la vida que me tocará pasar dentro de poco.

Encamino el barco al pequeño puerto del norte de la isla que suele ser nuestra recalada, donde llegamos al principio de la tarde. "Tripu A" hace su primer atraque con fondeo incluido como si fuera lo que hace toda la vida y sustituye con creces a un "Tripu Z" que pone todo su empeño en... poner su empeño. Pero no tiene reflejos y comete errores increíbles para una persona con experiencia y según nos ha contado dos barcos. Es mas un estorbo que otra cosa aunque es de agradecer su voluntad de estar en todo.

La cena, duchados y con ropa limpia, es en una típica y simpática taberna donde la "musaka" y las carnes son acompañadas por los "Salsikis" y el resina de "garafa" ayuda a soltar la lengua con cantidad de anecdotas e historietas. Un largo paseo por el pueblo nos lleva de nuevo al barco y a nuestros camarotes respectivos. Fuera hay una fiesta y se escucha la música desde lejos.

Hacia las 7 de la mañana me levanto y encuentro a "Tripu Z" dormido en la bañera envuelto en una toalla. No quiero despertar a nadie y comienzo a soltar el barco. Lo suelo hacer así con Lola con la que muchas veces yo solo saco el baro del muelle.

"Tripu Z" al notar el movimiento se despierta y me dice.

"Anoche he tenido que defenderme con el bichero de unos chicos que querían entrar en el barco. Les he oido subir por la pasarela y enredar en la bitácora. Cuando les he increpado han intentado venir hacia mi y solo cuando les he amenazado con el bichero han bajado y se han dedicado a insultarme. Por eso estoy aquí haciendo guardia por si vuelven" 


CONTINUARÁ...

lunes

LA VUELTA A CASA DEL 2011.-3º

Después de los años tengo comprobado la fiabilidad de las cartas y efectivamente hay algunas zonas en que hay errores, pero no en esta zona donde la precisión y exactitud es notablemente alta.

Pero lo que "Tripu Z" no sabía es que en la mesa de cartas hay un ordenador conectado a un GPS y en el que se rueda el magnífico y gratuito programa de navegación OpenCPN, y que va registrando sobre mapas los movimientos del barco.

Lo que debía de ser una linea recta se transformaba, como media hora después de irme a dormir en una serie de oscilaciones y cambios de rumbo que indicaban que se había parado el piloto automático y se había llevado el barco a mano durante una media hora , desviandonos del rumbo previsto mas de una milla y que luego de varios ajustes se había vuelto a poner el automático pero no en la forma de seguimiento de ruta sino directo a un punto.

La linea quebrada de la ruta mascada por los "Way Point" se transforma en una linea recta que pasa por encima de la isla de Atokos, una "piedrecita" de 1,5 kilómetros de largo con montes de 335 metros de altura. Unos cuatrocientos metros antes de llegar a la isla hay un cambio repentino de la dirección hasta dejarla por estribor y luego de nuevo se estabiliza el rumbo hacia el paso.

La conclusion que yo saco es que "Tripu Z" primero trato de llevar el barco a mano o jugo con el mando del piloto, perdiendo la calibración de "TRACK" y puede que incluso se durmiera por un rato despertando frente a la isla.

Tomo nota de que no me puedo fiar de que "Tripu Z" haga una guardia solo si es que puede quedarse dormido. Y menos en esta zona.

Al llegar a las cercanías del canal de Lefkas nos encontramos con una embarcación que hace la vuelta al mundo movido solo par energía solar. Un catamarán de 15 metros completamente cubierto de placas solares, que alimentan un motor eléctrico que le hace de propulsor, y alimentan el sistema de desaladora de agua de mat. Un generador Fisher Panda de 20 KW lo lleva sellado y solo para caso de emergencia. Podeis ver la información de este proyecto austriaco en:..-> leer sobre solarwave

Nuestra ruta para en la marina de Lefkas a hacer gasoleo y  seguimos ruta hacia el norte hacia Corfú. Aunque el hecho de no haber cruzado directamente a Sicilia, nos hace perder un mínimo de cuatro dias,  me parece injusto darles a mis tripulantes una paliza tan fuerte para empezar y con su poca experiencia, así que nos dirigimos a la isla de Paxos y paseamos por el canal de Gaios y vamos a fondear a la ensenada de Lakka al norte de la isla, donde llegamos mediada la tarde, pero con tiempo de darnos un baño.

Durante la travesía "Tripu Z" y yo polemizamos, discrepando bastante, sobre un tema muy técnico de los esfuerzos sobre los "winches" en función de los ángulos de ataque de las escotas. Pero "Tripu Z" trata de hacerme caer en trampas tontas y yo no consigo convencerle de que el modelo físico que el utiliza no se corresponde con el modelo real, O algo así. Hasta que al final del día tengo a un "Tripu Z" no dispuesto a ceder en su postura y a un "Tripu A" asustado de la behemencia de nuestra conversación.

"Tripu A" pretende hacernos una demostración de su "capacidad auditiva" para entender órdenes y nos propone un juego de, sin sonotone, que a estas alturas ya no le funciona apenas, entender desde la proa instrucciones dadas desde la popa. Yo no puedo por mas que reirme, pensando en las dificultades de hacerme entender por Lola que tiene oido de tísica, cuando estamos haciendo maniobras de fondeo o atraque, pero acepto el juego, que consiste en que yo le diga a mi elección, "amarrar por estribor" o "amarrar por babor" mirando hacia él y a media voz. A lo sumo lectura de labios, pero yo, con mala intención le digo otra frase como "tráeme el ancla por favor". Cuando se lo contamos se enfurruña, pensando que nos estamos riendo de él.

Propongo una buena ducha de agua caliente antes de cenar para esplicarles como funcionan las bombas y tanques del barco. A "Tripu A" le cambia la cara, pues llevamos mas de venticuatro horas de navegación y además nota el calor y dice que está todo sudado y deseando cambiarse de ropa. "Tripu Z" por el contrario dice que solo necesita un poco de lejía. Que si te pasas un trapo humedecido en lejía rebajada por el cuerpo, matas las bacterias y así no hueles. Y ya cansado de tanta incoherencia le digo que si esa es su idea de la higiene le puedo dejar en Corfú para que compre la Lejía. A estas alturas ya sé que no me voy a entender con "Tripu Z" y me marcho a dormir bastante cabreado.

Continuará....


domingo

LA VUELTA A CASA DEL 2011.-2º

A la hora convenida, muy de madrugada casi de noche, recibo una llamada de teléfono de mis visitantes que se han encontrado en el aeropuerto y han venido juntos hasta el Pireo en el autobús pero que se han despistado al llegar a la marina, así que salgo a su encuentro. A mi me resulta fácil reconocerlos desde lejos. Son los únicos transeuntes cargados con sendas bolsa de viaje.

El mas joven, llamémoslo "Tripu A", cuadra con la imagen que me había forjado, pero el segundo, --llamémoslo "Tripu Z", es una imagen preocupante. De aspecto muy envejecido, para ser mas joven que yo casi siete años, renqueando por el peso del equipaje y boqueando asfisiado por el esfuerzo de haber caminado unos cuatrocientos metros

Pero la mala impresión inicial se suma un detalle descorazonador. Observo que  "Tripu A"  se dirige a  "Tripu Z"  en un tono muy elevado, hasta que me aclara el propio  "Tripu Z"  que está sordo como una tapia y que el sonotone que lleva le funciona a veces si y a veces no y que suele llevarlo apagado porque le hace daño un zumbido que tiene.

"Tripu Z" hace todos los esfuerzos por ser agradable y comienza por enseñarme el arsenal de cosas que se ha traido de su barco. Colgados del cuello, el aparato auditivo, del tamaño de una radio, una navaja, unas gafas, una linterna, un pito y un teléfono. Y de la bolsa de viaje saca Emisora, anemómetro, compás de demoras, Gps portátil... Creo recordar que llevaba hasta un pequeño lanzador de bengalas.

Les doy una somera indicación del funcionamiento de agua y el WC y de donde están las cosas y los dejo descansar un rato, cada uno en su camarote, donde les he preparado su cama con sábanas limpias. Les indico que tienen un armario para guardar todas las cosas, incluso el chaleco inflable con arnés que les suministro y que  "Tripu Z"  me dice que no utiliza casi nunca, salvo tempestad. Yo insisto que en mi barco lo llevarán toda la noche como mínimo y yo decidiré cuando se lo ponen y que esto no es negociable.

Me voy a comprar pan y desayunar en la calle y meditar un poco. Estoy muy decepcionado con el aspecto del navegante  "Tripu Z" . Por preguntas que me ha hecho, verlo moverse en el barco y demás indicios , ya se que su experiencia se limita a navegar entre Denia y Alicante y una vez, hace años, que bajó de Barcelona a Valencia. Y pienso seriamente en dejarlo en tierra. Pero el pensar que al menos me puede hacer guardias y dejarme descansar un poco. El problema añadido es que al no oirse a si mismo entona mal y es difícil entender lo que dice.

Sobre las nueve de la mañana salimos en demanda del Canal de Corinto para hacer nuestra primera singladura.

Ver La vuelta del 2011 Etapa I en un mapa más grande
Me olvido de cruzar directamente desde Kefalónica hasta Sicilia (Unas trescientas millas) y apuesto por ir costeando y dejar los saltos reducidos a los dos de Sicilia a Cerdeña y de Cerdeña a Baleares.

"Tripu Z" intenta que charlemos sobre diferentes temas y discusiones vigentes en los foros y aunque discrepamos bastante a mi me gusta el debate por el debate, pero estamos dejando a  "Tripu A"  un poco al margen, ya que no conoce nada de ese mundillo.

El paso de Corinto siempre es un espectáculo y lo disfrutan. Somos tres bichos raros pero podemos entendernos.Con una idea de hacerles el viaje mas agradable elimino de nuestro plan de ruta la parada en la isla de Trizonia a la que llegariamos casi de noche y como el mar está como un plato seguir avanzando y parar por alguna de las islas del Jónico de las que conozco infinitas calas. Vanos alternando sueño, lectura y conversación y cocino para ellos algunas de mis especialidades.

"Tripu Z" se declara ardiente seguidor de la dieta Dunkan y comedor compulsivo de carne, lo que contradice el tipo de alimentación que se hace en el Capitán Teach, con muchísima variedad y no demasiada proteína,  "Tripu Z"  defiende su sistema de alimentación, pero yo observo con placer que no solo come sus raciones sino que rebaña con pan los fondos de cazuelas y fuentes.

Es todo un personaje, pero desde luego no es una mala persona. Pero a mi me está haciendo pensar y muy seriamente en algo que tendré que plantearme algún día. La edad lleva consigo una pérdida de capacidades motoras y psíquicas y, llegado un determinado momento, hay que abandonar determinadas cosas, pues se ha pasado el tiempo para ellas. "Tripu Z"  es un espejo en el que me miro y me veo a mi mismo dentro de algún tiempo. Y me asusta, pues sé que por mucho que me rebele no podré evitarlo.

Cruzamos bajo el puente de Rianon empujados por el viento y entramos en el Jónico, donde el viento calma y queda una noche estrellada y de mucha visibilidad.

Piloto automático programado para ir haciendo norte dejando las islas de Oxeia y Bromonas por estribor y en dirección al estrecho entre Meganissi y Lefkada. y me voy a dormir un par de horas.

Ya es de día cuando me despiertan y  "Tripu Z"  me espeta a bocajarro:

"Menos mal que yo estaba al timón y que no me fío de las cartas de "Navionic" que llevas en el ploter ni de la del Imray que llevas en la mesa de cartas. Casi chocanos contra una isla que no está en las cartas. He tenido que virar mas de 90 grados para no chocar"


SEGUIRA....


    

sábado

LA VUELTA A CASA DEL 2011.-Iº

Hace casi cinco meses que llevo callado, con el blog sin actualizar con nuevos comentarios y con una gran reticencia a escribir esta entrada.

Pero con un firme propósito de que antes de seguir adelante tengo que contar y analizar lo sucedido en los días de finales de agosto del 2011 entre los puertos de Atenas y el puerto de Teulada en el sur de Cerdeña.

Por primera vez en una navegación perdía totalmente la serenidad que debe acompañar a cualquier navegante que se precie y la pérdida del control me llevaba a los gritos, los insultos y las amenazas. Y además, injustamente hacía partícipe de ello a una tercera persona que nada (¿nada?) tenía que ver con la serie de incidentes que desembocaban en el desembarco de la tripulación.

Es muy posible que la versión que cuenten los demás implicados sea diferente a la mía, pero mas que la cadena de incidentes en sí quisiera transmitir, pasado el tiempo, como me han afectado en lo personal, llevándome a pensar muy seriamente que quizás ha llegado el momento del fin de mis travesías.

Pero empecemos por el principio.

Como cada año, después de pasar unos días deliciosos en compañía de nuestros invitados por las aguas del argosarónico nos dirigimos a Atenas para que Lola volviera en Avión hacia Málaga a incorporarse a su trabajo y yo comenzaba a desandar las 1500 millas que hay hasta Málaga.

Como siempre la duda de dejar el barco en Grecia o traerlo a casa y que de nuevo gana la segunda opción, que no sabría que hacer esos siete meses de invierno sin tener cerca mi querido Capitán Teach.

Una ruta larga por el sur de Italia y una corta cruzando por Malta y Tunez, desaconsejada por la situación aún no clara de la nueva Tunez.

El itinerario previsto era como siempre muy abierto para adaptarlo a la información meteorológica y tanto podía ser en rumbos directos o costeando Italia parando a dormir en cada puerto.

Para este recorrido había invitado, como cada año, a que si alguien de la Taberna del Puerto, el foro del que soy asiduo, quisiera venir conmigo, lo podía hacer como mi invitado para ayudarme en la navegación en cualquiera de los tramos. En años anteriores había tenido excelentes compañeros que casi siempre son personas que quieren experimentar en que consiste una navegación de Altura de varios días antes de comenzar ellos a hacer las suyas propias.

Al mismo tiempo recibía un correo de una persona que quería venir a pasar esos días como experiencia y que no tenía ninguna idea de navegación. Preocupado por esta persona y su capacidad por aguantar "la Paliza" le hice toda una serie de preguntas y propuestas para no someterle a una tortura innecesaria. Pero era una persona que tenía asumido que era una experiencia y que como tal podía resultar no muy agradable y que en todo caso siempre se podía desembarcar y coger un avión. Su perfil era el de una persona acostumbrada a viajar y me propuse hacer de él un nuevo aficionado al mundo de los barcos y las travesias. Le propuse que solo me ayudara con los gastos de una semana y que el resto, tardáramos lo que tardáramos corría de mi cuenta, ya que normalmente en los viajes de vuelta lo que quiero es ayuda y compañia  Así conseguía no tener que depender de estar determinado día y hora en determinado sitio que es algo que agobia en exceso los viajes.

Con todo aceptado por esta persona y coordinado con el otro navegante con supuesta experiencia todo parecía sonar a música celestial, sumado a unas previsiones de meteorología anormalmente favorables.

Pero en esta alegría empezaron los errores. Simplemente no hice ninguna averiguación sobre las capacidades y conocimientos de esta segunda persona para hacer este recorrido. Lo había conocido "virtualmente" en un foro de náutica de los que participo y en sus intervenciones parecía una persona con un gran bagaje de experiencia, que incluso había comentado querer hacer Grecia con su barco, un 38 pies, Incluso se barajó la posibilidad de que viniera su compañera, habitual acompañante de sus "travesias".

Así que me concentré en los preparativos, avituallamiento, gasoleo, cambios de aceite, filtros, agua y una limpieza a fondo de los camarotes de mis tripulantes.

Y así llegó la madrugada del día 25 de agosto de 2011 en la protegida ensenada del puerto de Marina Cea cerca del Pireo.

Continuará...


lunes

10-08-2011.- OTROS

De nuevo dejo que sea uno de los pasajeros el que tome el hilo de la narración, y será la última. aunque hay las de Oscar, Montse, Leire, Manuel.... y mas o menos todas en la misma tesitura, que nos llevan despues de vaguear durante el mes de agosto al eterno dilema de si dejar el barco en Grecia o volver con él a casa.
He aquí la narración de Josu, al que casi casi hacemos dejar de fumar
Hemos pasado una semana a bordo del Capitán Teach y nuestra única intención era disfrutar de la paz y la tranquilidad de la vida náutica y huir de nuestros respectivos estresantes trabajos, aunque sea sólo por unos días y además probarnos que seríamos capaces en un futuro de realizar nuestro sueño, tal vez imposible, de llevar una vida transmundista, embarcados en un velero y poder dar vueltas por los mares del planeta y disfrutar de ese bien, cada vez más escaso, en nuestro mundo de prisas, que es el TIEMPO.

Y la verdad es que nos embarcamos el lunes 8 de Agosto por la tarde en el puerto de Poros. Y digo por la tarde, pues en el hotel de Atenas en el que nos alojamos el día anterior, nos habían asegurado que dispondríamos de ferry con destino a esta isla a todas las horas en punto. Y la verdad es que no sé si será por nuestro inglés (bastante deficitario y que habrá que ampliar para enfrentarnos al mundo) o por la pachorra de los griegos, es que fuimos al puerto de Atenas cargados con nuestras "2 bolsitas de viaje", que después nos dimos cuenta que llevábamos ropa suficiente como para circunnavegar el planeta 2 ó 3 veces (para el que esté interesado que lleve lo justo y que no lo llene todo de "por si acasos"). Así que cuando fuimos a sacar los billetes, la amable señorita de la taquilla, nos comunica que el primer ferry disponible es a las 14,30 horas. Así que no queda mas que esperar y llegar a Poros a la achicharrante hora de las 16,30.

  • Con un sol de justicia y sin apenas viento, y acarreando "las bolsitas" nos encontramos con Alberto. En el barco nos esperaban Lola y otra pareja majísima de navegantes ocasionales, Montse y Oscar, que desembarcarían 2 días después. Sin más preámbulos y después de instalarnos en nuestro camarote nos pusimos rápidamente en marcha y ahí comenzó nuestro periplo, que de una forma resumida constó todos los días más o menos de la siguiente planificación de jornadas

  • Te levantas de la cama cuando quieres, sobre las 9,30. Para entonces Alberto ya ha hecho de todo, pero en absoluto silencio, para no molestar a su dormilona tripulación.
  • Acto seguido y para quitar las legañas, baño en un mar como una balsa de aceite y con una temperatura de agua, 29º C, que la verdad que no despierta mucho pero que se agradece.
  • Según te secas al aire, Lola ha preparado café y todavía casi chorreando te tomas una buena taza con unas galletas y nos ponemos en marcha hacia alguna cala para pasar el día.
  • Sobre las 11,00 Lola pregunta quién quiere desayunar y prepara tostadas con tomate rallado y aceite, fruta, etc. y más café.
  • En plena navegación se toman varias cervecitas para combatir el calor y si el viento lo permite y por supuesto no es de proa cerrada, se sacan las velas y si no navegación placentera a motor.
  • Se llega a la cala correspondiente con aguas azul turquesa  y baño tras baño, llega la hora de comer, indefectiblemente las 15,00 horas, porque como le decíamos a Lola que el Capitán Teach es como el chiste, en mi casa se foll... a las 9 estés o no estés, y aquí pasa lo mismo con la comida. Por supuesto que nadie se piense que se come cualquier cosa, sino gazpachos, escalibada, mousaka, etc. por supuesto que nada de bocatas, todo cosas refrescantes y ricas y que Lola se toma su tiempo cocinando y horneando mientras vamos navegando.
  • Después de comer, siesta va, baño viene y se pasa la tarde, hasta que hay que poner rumbo al puerto de destino para pasar la noche, casi siempre fondeados, porque los griegos todavía no han descubierto que sus puertos son anárquicos y desordenados, sin instalaciones a las que estamos casi todos acostumbrados en las marinas tradicionales y en donde para poder hacer agua, luz o gasoil te tienes que vover loco para encontrar al waterman correspondiente por las calles del pueblo. Si lo viesen como una buena fuente de ingresos y que tienen un país en el que el turismo náutico puede ser una permanente entrada de ingresos, otro gallo les cantaría, pero por ahora no es así.
  • Después de fondear, duchita, desembarco en el dinghy para hacer alguna compra para la cena y por supuesto la cerveza de rigor en tierra.
  • Una vez de vuelta al barco, se prepara la cena, siempre con fundamento y rico rico. Regada con vino de la sentina. Un poco de tertulia y a intentar observar las Perseidas. Después, y si el calor lo permite a dormir al camarote y sino en cubierta con el fresquito.

Y al día siguiente oootra veeez... pero puede que amenizado con diferentes pasatiempos, aprender a hacer nudos, o que se averíe el molinete y haya que izar el fondeo a mano. Pero como decía Alberto, "menos mal que eres vasco..."

Después de 7 días dando vueltas por Poros, Aegina, Porto Heli, Ydra, Espetses, Corfo, etc. disfrutando de unos paisajes maravillosos, y de una mar como de cuento, recalamos en Atenas y nos despedimos con harto dolor de esta pareja tan simpática, que nos han hecho disfrutar de su barco, de sus conocimientos náuticos y de su forma de vida, como si nos cociéramos desde siempre."

Y así fué pasasndo todo el mes de agosto, con Oscar y Montse, que me deben una crónica y una visita, Una pareja, Leyre y Manuel que solo pudo estar tres dias con nosotros en su periplo por Grecia y muchos muchos buenos ratos que nos animan a seguir con este tipo de vida mientras gocemos detan gratas ompañias, pero se acaba el verano y solo queda volver a casa.






    01-08-2011.- ROBERTO

    Durante los días 1 al 22 de agosto tenemos el barco lleno de invitados, con los dos camarotes al completo casi todos los días y esto para nosotros supone una novedad, ya que nunca hemos tenido cuatro personas con nosotros.

    Además de todos los que vienen no hay ninguno que tenga experiencia de navegación y como las previsiones meteorológicas para agosto en el área de la cicladas es de vientos muy fuertes, decidimos quedarnos a vaguear por la zona del Argosarónico, que acabamos de recorrer.

    Nuestro miedo resultó infundado. Hemos pasado los días mas fenomenales de los últimos tiempos, ya que todos, sin excepción, han sido magníficos compañeros de viaje, se han integrado a la perfección con nosotros y con sus compañeros de travesía y el ambiente a bordo ha sido de lo mas agradable que recuerdo.
    Nuestro mas madrugador de esta etapa ha sido Roberto, que nos ha localizado por una web de viajes aventura (¡¡) en la que alguien ha escrito sobre nosotros. De ahí al blog y ...

    Roberto es de esas personas de las que te quedas con ganas de conocer mas a fondo y de las que siempre me gustaría llevar en el barco. Pero siguiendo nuestra costumbre dejemos que sea él el que nos cuente sus impresiones.

    Cuando Alberto me pide que cuente mis impresiones sobre los días a bordo tengo dificultades en ponerme a teclear porque lo primero que me aborda son montones de imágenes que me vienen a la cabeza sin orden y no sé por dónde empezar. Contar el recorrido que seguimos, el nombre de las islas, las calas, los puertos, los fondeos…resultaría tedioso por mi parte. Poros, Hidra, Spetses, Ermioni, Porto Heli, Nauplia…Todo eso se lo dejo a Alberto, que hace unas amenas descripciones en cada post de este blog. Prefiero compartir algunas imágenes que han quedado en mi memoria. Seguro que dan una idea más acertada de cómo viví esta experiencia.
    Lo primero que recuerdo es aire bohemio de Alberto con su sombrero de paja y la sonrisa de Lola cuando nos encontramos en el puerto de Egina. Unas horas después de aterrizar en Atenas ya estamos fondeados en una preciosa cala con las aletas, las gafas y el tubo puestos. Después nos esperaba una fantástica comida preparada por Lola y navegación a vela al atardecer. Y era sólo el primer día.
    Recuerdo salir una mañana por la bocana de Zea Marina, en el Pireo,  a mar abierto y soltar la mayor. Recuerdo ver cómo ésta comienza a recoger el viento e hincharse, miro el horizonte despejado y lleno de luz y siento en ese momento que sólo por esta imagen ha merecido la pena venir hasta aquí.
    Recuerdo como fondeados cerca del cabo Sunion nos ponemos a comer sabe Dios qué delicioso plato preparado por Lola mientras a nuestro alrededor cae un chaparrón y tratamos entre risas que la comida no se acabe mojando.
    Recuerdo los ratos pasados sentados en la proa con los pies sobre al ancla mientras navegamos y dejo que la brisa me acaricie y el paisaje que nos rodea y que atravesamos vaya penetrando dentro de mí.
    Recuerdo las montañas del Peloponeso desde el mar; y el cielo estrellado y el agua en calma por las noches cuando todos están en sus camarotes y se oye solo el silencio; y el refrescante primer baño a primera hora de la mañana; y pasar junto a islotes cuyo nombre no conozco ni me importa mientras nos tomamos un magnífico aperitivo.
    Recuerdo asombrarme al comprobar que la zodiac también tiene ancla y ver a través de mis gafas como Alberto recoge erizos sumergido con la agilidad de un pescador de esponjas.  
    Recuerdo no poder parar de reírme por las tonterías que Oscar y yo nos decimos en el salón mientras recogemos los platos de la cena y arriba, en la bañera, Lola, Alberto y Montse no entienden nada de lo que está pasando abajo.
    Recuerdo lo que me costó hacer bien un ballestrinque, el más sencillo de los nudos, y mi frustración por no haber aprendido a hacer el as de guía. Alberto, siento que tus esfuerzos en el mundo de los nudos haya sido en vano. Al menos hemos aprendido otras cosas, por ejemplo, los metros de ancla y cadena necesarios en un fondeo o la colocación de las defensas al atracar en puerto. Ahora ya sé que cazar un cabo es tirar de él y qué significa navegar amurados a estribor. Así que todo no está perdido, todavía es posible que hagas de mí un hombre de mar.
    Recuerdo haber aprendido también otras cosas útiles. Por ejemplo, que el mar,  la barbacoa y un buen congelador a bordo no están reñidos. Y si no que me pregunten cómo estaba esa carne de Ávila que había estado durmiendo congelada toda la travesía del Mediterráneo hasta que por fin la hicimos acomodo en nuestros estómagos. Por no hablar del estofado de buey.
     Y ya que la cosa va de comida, especial mención merecen mis recuerdos culinarios. Y en eso tiene mucha culpa Lola, siempre preocupada por que no nos faltara cerveza fría en la nevera. Recuerdo su estupendo gazpacho, el clásico y el de Antequera, los boquerones, el té a la menta, etc. La musaka griega simplemente espectacular. Bueno, también riquísima la escalibada de Montse y la tortilla de patata de Oscar. Y para ser justos, el estofado de buey fue obra de Alberto. Cocina de tres estrellas Michelin en el Capitán TeachRecuerdo la maravillosa cala de la isla de Spetses: el agua transparente, los pinos cayendo hasta la orilla del mar, el cielo azul, la iglesia blanca en el cabo.  Me toca hacer la comida con Oscar, así que los dos nos quedamos a bordo mientras los demás se van con la zodiac y estoy nervioso porque quiero acabar cuanto antes para sumergirme y empaparme de ese lugar.
    Recuerdo los muchos momentos de conversación en cubierta mientras tomamos un té o un café recién hecho a primera hora de la mañana, ya navegando, la brisa nos acaricia y el capitán nos cuentas sus aventuras y desventuras dentro y fuera del mar. Y no son pocas. Normal, no se podía esperar otra cosa de un asturiano andaluz. JRecuerdo dejar ya el barco, coger el ferry a Atenas y echarles de menos: a Lola, a Alberto, y también a Montse y a Oscar. Y recuerdo pensar mientras miro por la cubierta ya cerca del Pireo que no me he sentido un pasajero en el Capitán Teach, sino un miembro de la tripulación. El barco en esos días fue mi hogar. Gracias Alberto y Lola.
    Me encantó navegar con vosotros. Sé que repetiré la experiencia.
    ¡Buena mar allá donde estéis!

    A Roberto se le ha olvidado incluir en la lista de comidas su Bacalao al Pill-Pill, uno de los mejores que he comido nunca, con una receta de su familia que es mas que de sobresaliente.

    Os dejo también una foto sacada esos días de hasta donde tiene que llegar la imaginación para poder pasar la noche en algunos puertos de Grecia en Agosto , Como podéis ver cualquier sitio es bueno




    viernes

    29-07-2011 de Korfos a Aegina y alrededores

    Desde Korfo, emprendemos una ruta poco habitual y nos dirigimos hasta el grupo de islas deshabitadas de Diaporioi, en las que hay algunos fondeos de los que tenemos que se trata de fondeos tranquilos y de aguas muy limpias, aunque al llegar encontramos que todos los sitios verdaderamente buenos están ocupados por piscifactorías y mas que se están instalando.
    Desgraciadamente es algo que va sucediendo por todas las costas del Mediterraneo. El turismo náutico y la fabricación de proteína están en conflicto. Y siento que de nuevo el ridículo cubre las acciones de los políticos, que elevan su voz contra la destrucción de las praderas de poseidonea por nuestras diminutas anclas y nos castigan con los tan incómodos tanques de aguas fecales y no dicen nada en contra de esos millones de culos piscicolas que arrasan con sus excrementos cualquier sitio donde hay una piscifactoría.
    Primero desaparece la visibilidad, encubriendo que poco después desaparece todo lo que merece la pena ser visto, la vida.
    Llegamos a Aegina sin problemas y ahí esperamos a nuestros visitantes del mes de agosto, paseando por sus calles y recuperando esos sitios entrañables donde tomar una cerveza Mithos muy fría, pues el calor empieza a apretar bastante encerrados en un puerto.
    En Aegina hay un monte mágico, rodeado de pinos y olivos, desde el que se divisa desde Atenas, hasta Corinto y en el centro la isla de Salamina que alguna vez quiero rodear. Sentado sobre una piedra cualquiera se te pueden pasar horas y horas sin notarlo. El tiempo se ha detenido y puedes soñar a Eulises buscando Itaka junto a Papandreu buscando dinero de sus enemigos recientes. Delante de ti está Grecia
    El sitio ha sido aprovechado para colocar un templo, sobre un terreno descarnado y de los que mejor indica el sistema de construcción de estos templos
    Es de los pocos en que se puede apreciar este segundo nivel de la crujía central que sujetaba el tejado a dos aguas, que al ser de madera está totalmente perdido en todos los templos. de nuevo la pregunta ¿Para cuando una reconstrucción real, que pueda transmitir todo lo que esos edificios tenían? La vida está llena de colores, de contrastes. Tan solo los sepulcros, y solo en nuestra cultura, son grises, en blanco y negro
    La peculiar estructura de puertos de Grecia tiene su explicación casi siempre en este tipo de pequeñas ensenadas y en la necesidad de sacar los barcos del agua a que se secaran y a limpiar las obras vivas de algas moluscos y crustáceos adheridos.
    Casi estoy por apostar que los muros a los que nos amarramos son la consecuencia de la aparición de los ferrys como sistema de transporte inter islas. De ahí que raramente un puerto es otra cosa que un espigón

    Aegina ciudad, merece un paseo tranquilo, que como siempre nos devuelve gratas sorpresas. Aunque la foto típica sea la de los barcos vendiendo fruta en el puerto, no podemos olvidar que estamos ante la isla de las playas preferidas de los atenienses, y que una cierta intelectualidad ha hecho de esta isla uno de sus feudos. Costantemente hay exposiciones de pintura y por ello hay galerías de arte por muchos sitios. Entre ellos este curioso castillo que a la caída de la tarde, con la llegada de las temperaturas mas tolerables de la noche griega, se viste de luces y "glamour" y con sus puertas abiertas permite ver las muestras de todo tipo que se suelen exponer en sus paredes e interiores