Un problema para localizar información sobre grecia y sus poblaciones es la trans-literación que se provoca al traducir desde el griego (Mas bien desde "los Griegos") a nuestra fonética (Mas bién a "nuestras fonéticas")
Monevasia, Monemvassia, Monenvassi e incluso Nomenvassia es el nombre de la ciudad amurallada cerca del puerto de Gefyra o Yefira, donde a su vez está la marina donde atracamos llamada Marina de Manebasia.
M y V, Y, G aparecen cambian y se sustituyen con total impudicia, no solo en la cartografía náutica sino que lo hacen en los carteles indicativos en el caso de que estén traducidos a nuestro alfabeto.
Así que cuando dejamos atras el puerto donde esta esa ciudad dentro de la muralla, nos vamos navegando hacia una ensenada muy profunda que está una millas mas hacia el norte y que se llama... Gerakas ....Ieraka...Yerakas y todas las versiones con "s" y sin "s" y con "k" sin "k".
El caso es que con K o sin ella la ensenada de Gerakas, profunda como un fiordo noruego termina en un pequeño puerto donde un magnífico equipo de sonido emitia los sutiles matices de una inconfundible Joan Shuterland cantando arias de Donizetti.
La sonoridad era prodigiosa y las pocas personas que había guardaban silencio escuchando algo que debe ser como un rito, y es este raro concierto.
Poco después finalizada la música, volvió la actiidad al puerto y nosotros seguimos nuestro viaje, con otro apunte de sitio a volver y cosa a investigar.
Un poco mas hacia el norte está la bahía de Kiparissi o Kiparissión con tres lugares para pasar la noche. El primero de ellos el favorito de Rod Eikell, el autor de una de las guia que publica la empresa de cartografía Imray. Un libro muy usado por los navegantes por la cantidad de información que contiene, aunque hay que pensar que Eikell ha descrito muchos de los sitios desde la óptica de su barco, inicialmente un pequeño velero de 9 metros y muchas veces lo que declara como puerto no lo es tanto para un barco de 14 metros.
Pero es lectura obligada y en este caso concreto no podemos de estar mas de acuerdo con él. El sitio es un encanto. Caben un máximo de cuatro barcos y el fondeo es en casi 20 metros, pero es uno de esos sitios mágicos de Grecia.
Hay una playa con buen tenedero y un pequeño muelle donde abarloarse (es imposible fondear un ancla por los bolones de piedra del fondo) y donde caben tres barcos.
Cuando llegamos y una vez que hemos terminado la maniobra y colocado los "esprins" aparece un marinero de un barco pesquero y nos comenta que mejor ponemos el barco en la otra cara del muelle, que por la noche llega el "reef" de alta mar y es molesto. Así lo hacemos y el barco queda amarrado de nuevo y listo para ser abandonado mientras nos vamos a recorrer la aldea y darnos un baño en la playa.
Por la popa tenemos la "humilde morada" del pescador, que poco mas necesita para ser felíz.
"NOS HA JODIDO, A OTRO QUE LE SOBRA EL ARQUITECTO" que díría mi amigo Tomas
Y como hoy hace años que Lola y yo nos conocimos, lo vamos a celebrar con el fruto de nuestro desvelo energético y sus 100 amperes diarios de consumo. Unas cocochas que nos acompañan desde Málaga y de las que aún tenemos alguna reserva.
Y diría Tomás " Y CON LO QUE FALTA PARA AGOSTO YA ESTA ALBERTO DANDO POR EL C... CON SUS POPAS"
Monevasia, Monemvassia, Monenvassi e incluso Nomenvassia es el nombre de la ciudad amurallada cerca del puerto de Gefyra o Yefira, donde a su vez está la marina donde atracamos llamada Marina de Manebasia.
M y V, Y, G aparecen cambian y se sustituyen con total impudicia, no solo en la cartografía náutica sino que lo hacen en los carteles indicativos en el caso de que estén traducidos a nuestro alfabeto.
Así que cuando dejamos atras el puerto donde esta esa ciudad dentro de la muralla, nos vamos navegando hacia una ensenada muy profunda que está una millas mas hacia el norte y que se llama... Gerakas ....Ieraka...Yerakas y todas las versiones con "s" y sin "s" y con "k" sin "k".
El caso es que con K o sin ella la ensenada de Gerakas, profunda como un fiordo noruego termina en un pequeño puerto donde un magnífico equipo de sonido emitia los sutiles matices de una inconfundible Joan Shuterland cantando arias de Donizetti.
La sonoridad era prodigiosa y las pocas personas que había guardaban silencio escuchando algo que debe ser como un rito, y es este raro concierto.
Poco después finalizada la música, volvió la actiidad al puerto y nosotros seguimos nuestro viaje, con otro apunte de sitio a volver y cosa a investigar.
Un poco mas hacia el norte está la bahía de Kiparissi o Kiparissión con tres lugares para pasar la noche. El primero de ellos el favorito de Rod Eikell, el autor de una de las guia que publica la empresa de cartografía Imray. Un libro muy usado por los navegantes por la cantidad de información que contiene, aunque hay que pensar que Eikell ha descrito muchos de los sitios desde la óptica de su barco, inicialmente un pequeño velero de 9 metros y muchas veces lo que declara como puerto no lo es tanto para un barco de 14 metros.
Pero es lectura obligada y en este caso concreto no podemos de estar mas de acuerdo con él. El sitio es un encanto. Caben un máximo de cuatro barcos y el fondeo es en casi 20 metros, pero es uno de esos sitios mágicos de Grecia.
Hay una playa con buen tenedero y un pequeño muelle donde abarloarse (es imposible fondear un ancla por los bolones de piedra del fondo) y donde caben tres barcos.
Cuando llegamos y una vez que hemos terminado la maniobra y colocado los "esprins" aparece un marinero de un barco pesquero y nos comenta que mejor ponemos el barco en la otra cara del muelle, que por la noche llega el "reef" de alta mar y es molesto. Así lo hacemos y el barco queda amarrado de nuevo y listo para ser abandonado mientras nos vamos a recorrer la aldea y darnos un baño en la playa.
Por la popa tenemos la "humilde morada" del pescador, que poco mas necesita para ser felíz.
"NOS HA JODIDO, A OTRO QUE LE SOBRA EL ARQUITECTO" que díría mi amigo Tomas
Y como hoy hace años que Lola y yo nos conocimos, lo vamos a celebrar con el fruto de nuestro desvelo energético y sus 100 amperes diarios de consumo. Unas cocochas que nos acompañan desde Málaga y de las que aún tenemos alguna reserva.
Y diría Tomás " Y CON LO QUE FALTA PARA AGOSTO YA ESTA ALBERTO DANDO POR EL C... CON SUS POPAS"